El deporte siempre es bienvenido. Ofrece fuerza muscular, aumenta la resistencia y optimiza el sistema cardiovascular. Sin embargo, ciertas actividades físicas podrían dejar alguna marca temporal en el cuerpo, popularmente conocidas como ‘moretones’.
Su nombre científico es ‘contusión muscular’ o ‘hematoma’ y pueden ocurrir al practicar determinados deportes, ya sea de contacto, de combate o si se realizan con demasiada intensidad.
¿En cuáles se corre más ese riesgo? Te lo presentamos a continuación.
Las contusiones son el resultado de un golpe directo o golpes repetidos que algún objeto no afilado ha hecho contra alguna parte del cuerpo. Debido al impacto, se machucan las fibras musculares subyacentes y los tejidos conjuntivos.
Su color se debe a la presencia de sangre atrapada bajo de la superficie de la piel. La lesión rompe vasos sanguíneos pequeños, los cuales se abren y dejan salir la sangre por debajo de la piel, pero sin romperla.
Según la Academia Estadounidense de Cirujanos Ortopédicos (AAOS, por sus siglas en inglés), las contusiones son la segunda causa de lesiones deportivas (después de las distensiones musculares).
Los moretones comienzan luciendo de color rojizo, que luego se torna azul violáceo y después amarillo verdoso. Finalmente, la piel vuelve a su coloración normal. En algunos casos, este proceso puede llevar meses, pero la mayoría suele rondar las dos semanas.
Aunque suelen ser dolorosos, la buena noticia es que la mayoría de las contusiones son leves y se curan rápidamente. Es decir, no es necesario que la persona se tome un descanso. Sin embargo, si es grave, podría causar un daño profundo en los tejidos.
Esto generaría complicaciones que le impedirían a la persona retomar el deporte durante meses, pues algunos hematomas pueden ser ya sea en la piel, pero también en un músculo o un hueso, los cuales serían los más serios.
Entonces, si el daño es más profundo, podría terminar en un hueso roto, una articulación dislocada, un esguince, un desgarro muscular u otras lesiones. Incluso, las contusiones en el abdomen serían capaces de dañar órganos internos.
De ahí que sea tan importante conocer en qué deportes se correría un mayor riesgo de sufrir algún moretón, para así extremar precauciones.
Se trata de aquellas disciplinas en las que hay una constante confrontación física con el oponente. Algunos de ellos son ampliamente conocidos, como el boxeo, el judo o el taekwondo, así como el karate, las artes marciales mixtas.
Por su naturaleza, los contendientes de estos deportes podrían sufrir algunas contusiones. Acudir con un profesional de la salud será crucial en caso de que los síntomas no disminuyan. Los médicos pueden realizar un examen físico para determinar la extensión y ubicación exacta de la lesión, mediante radiografías, ecografías o imágenes por resonancia magnética.
También existen deportes que, sin ser catalogados como ‘de contacto físico’, sí se caracterizan por constantes roces y choques entre jugadores. Algunos ejemplos podrían ser el futbol soccer o el béisbol.
Según el deporte practicado, puede que la persona necesite usar almohadillas especiales de materiales rígidos o semirrígidos para dispersar la fuerza de los impactos contra el cuerpo. Pero si hay un hematoma grande que no desaparece con el tiempo, quizá el médico deba drenarlo quirúrgicamente.
También existen disciplinas que implicarían un mayor riesgo de moretones debido a su nivel de exigencia, considerando la resistencia, fuerza, potencia, velocidad y agilidad. Eso favorecería el riesgo de sufrir alguna contusión.
En algunos casos, a esa exigencia se le suma un contacto físico extremo, como en el hockey o el futbol americano. En otros, el esfuerzo radicaría en la fuerza y flexibilidad, como en la gimnasia.
Y en algunos más, el riesgo de alguna contusión se debería al movimiento rápido de los pies, como ocurre al practicar tenis, básquetbol o incluso esgrima. O qué tal cuando el impacto es directamente con una parte del cuerpo, como se da en el volibol o en las artes marciales, al romper ladrillos o tablas.
Tras una lesión de este tipo, se podrá volver a practicar el deporte cuando se haya recuperado completamente la fuerza, el movimiento y la resistencia.
De no cumplir con las recomendaciones médicas, la persona puede complicar su situación y que se acumule presión en el área afectada, lo cual alteraría la circulación sanguínea (síndrome compartimental); o que no se haga el descanso suficiente y se forme hueso en el músculo lesionado (miositis osificante).
Ante algún moretón se recomienda colocar hielo sobre el área lesionada. Este es el principio básico de la Crioterapia.
Pero atención, aplicarlo directamente sobre la piel podría producir quemaduras. Por ello, la mejor manera de colocar frío sobre un área con moretones son las compresas.
Las compresas Backfreeze son una terapia no invasiva para brindar alivio. Al contacto con el cuerpo, actúa directamente sobre el flujo sanguíneo para prevenir o aliviar dolores ya sea musculares, articulares y de tendones.
Estas compresas pueden servir para aliviar el dolor, adormecer una articulación y reducir la inflamación. Además, están compuestas por un gel activo concentrado para reducir mejor la inflamación, así como un vinilo libre de látex, el cual es muy resistente y previene reacciones alérgicas.
Además, tienen la ventaja de presentarse en diferentes tamaños, son fáciles de transportar y cómodas de aplicar. Existen en tamaño estándar, mini, max y especial para el área cervical.
Practicar algún deporte siempre será una actividad que nos brindará beneficios. Además de la salud, también conlleva habilidades y destrezas como el trabajo en equipo, la competencia y la cultura del esfuerzo.
Pero en algunos casos, estas prácticas pueden relacionarse con ciertas contusiones musculares como resultado de algún golpe directo. Por fortuna, suelen ser leves y curarse rápidamente. Conocer qué deportes se relacionarían con un mayor riesgo de moretones pueden ayudarte a protegerte y extremar precauciones.
Al aplicar compresas frías, no sólo se obtendría un alivio inmediato, sino también una más rápida recuperación para volver a hacer aquello que tanto te gusta. Sin duda, las compresas frías son un excelente compañero de equipo.
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